Maria Acaso propone considerar la ciudad como un aula y usar la creatividad como herramienta para repensar la educación actual. Critica la obsolescencia de la educación tradicional, que es vertical, fomenta el individualismo y llega a matar la pasión por aprender.

Su propuesta principal es utilizar el arte y la creatividad, a lo que llama “art thinking”, como metodología para generar aprendizaje significativo. Este “art thinking” se entiende como una forma de pensar y producir conocimiento, no como crear objetos para el mercado del arte

Presenta cuatro principios fundamentales: el pensamiento divergente, que busca múltiples soluciones en lugar de una única respuesta. La “pedagogía sexy”, que reincorpora el placer, el asombro y lo inesperado en el aula para captar la atención y facilitar el aprendizaje. Entender la educación como producción cultural y empoderar a educadores y estudiantes como artistas. Finalmente, el formato DIWO (“Do It With Others”), promoviendo el trabajo colaborativo en proyectos largos, lentos y aceptando el fracaso como parte del proceso creativo. Estas metodologías artísticas son aplicables a cualquier disciplina y buscan generar pensamiento crítico.

M.Acaso enfatiza que la educación necesita una revolución urgente y anima a los técnicos de cultura y educación a ser valientes, arriesgarse y colaborar para transformar el panorama educativo.